martes, 27 de septiembre de 2011

El otro informe

Por Gabriel Mercado

El presidente Felipe Calderón acaba este mes de dar a conocer su informe a lo largo de cinco años fallidos.
Lo común es que los gobernantes dan a conocer las cifras halagadores, lo "invertido" en obra pública, los apoyos entregados a la gente, ¿pero dónde están las cifras negras? Aquellos datos oficiales negados a ser mostrados cual hijo bastardo.
Veamos a continuación los números de los que Felipe Calderón debería avergonzarse, y nosotros también como mexicanos por no exigirle resultados ni rendición de cuentas o soluciones a esta problemática:

-Alrededor de 50 mil muertos en sus sexenio. Una desenfrenada guerra entre cárteles ha sido el aliciente para el aumento de la violencia en el país. Sin embargo el Ejecutivo echó pólvora al fuego al lanzar a un Ejército sin preparación a realizar labores de policías y ministerios públicos al mismo tiempo.
Sin duda muchos delincuentes han caído en las refriegas, pero igualmente la sangre de inocentes baña las calles, y no hay autoridad capaz de garantizar la protección a la vida, y mucho menos traer justicia a los amigos y familiares de las víctimas.
A estos se suman más de 50 periodistas muertos en sólo seis años.

-52 millones de pobres. El 46.2 por ciento de la población se encuentra en una situación económica precaria.
De 2008 a 2010, de acuerdo a cifras del Inegi, 3.2 millones de personas engrosaron las filas de los que tienen poco. Es decir, la administración calderonista ha generado mayor desigualdad y rezago social.
Unas 28 millones de personas tienen carencia en alimentación, se mueren de hambre, mientras en esos años teníamos un secretario de Hacienda bastante rechoncho, Agustín Carstens, y su sucesor, ahora aspirante presidencial, Ernesto Cordero, dice que con 6 mil pesos alcanza para comprarse un carro, una casa y mandar a los hijos a colegios privados.

-El autonombrado presidente del empleo cerró en agosto con 2 millones 885 mil desempleados. El 5.79 por ciento de la Población Económicamente Activa no halla trabajo. Cabe agregar que los pocos afortunados reciben sueldos muy por debajo de lo que deberían recibir y no todas las empresas brindan las prestaciones marcadas por la ley.

-33 millones en rezago educativo. En el país 4 de cada 10 personas mayores de 15 años no concluyeron estudios de educación básica: son analfabetas, no terminaron la primaria o la secundaria. De acuerdo al INEA el número de mexicanos con capacidades mínimas de educación se incrementó más de 3.6 millones de personas en las últimas dos décadas (recuerden que llevamos una del PAN), al pasar de 29.7 millones a 33.4 millones. Unos 10 millones no concluyeron la primaria y otros 17 millones de jóvenes y adultos truncaron sus estudios en la secundaria... 6 millones son analfabetas. ¿No dicen siempre que la educación es una prioridad? ¿Dónde está esa famosa alianza hecha con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación? Así, era ese acuerdo para dejar a Elba Esther Gordillo poner a Miguel Ángel Yunes en el Issste, a Francisco Yánez en la Lotería Nacional y Roberto Campa en el Sistema Nacional de Seguridad Pública.


-El 8% de las localidades del país, con mayores índices de marginalidad, carecen de unidades médicas o de atención primaria de salud cercana. La tan famosa cobertura universal en salud es un mito. Como ha quedado demostrado, el Seguro Popular no cubre todas las enfermedades, y en caso de complicaciones en un embarazo, aunque el parto lo solventa el gobierno federal, el resto de los gastos deben correr a cuenta del paciente, sin importar sea una persona pobre y sin recursos y el costo sea muy elevado.

-Opacidad e intolerancia a la prensa. Calderón ha demostrado no soportar las críticas, tal fue el caso de Carmen Aristegui, quien fue despedida de su medio al sólo publicar la nota donde acusaban al mandatario de tener problemas de alcoholismo y pedir en su programa que saliera Calderón a aclarar las cosas. Afortunadamente después fue reinstalada.

-667 millones de pesos gastados en los festejos del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución. En total en el marco de estas celebraciones se erogarán 2 mil 838 millones de pesos en ocho proyectos que concentran el 75% del gasto. Una de esas obras es la Estela de Luz, la cual pese a que ya pasó un año "de la fiesta", aún no ha sido concluida y piden más dinero para esos trabajos... Esto sin considerar el monto para realizar 27 millones de ejemplares del libro "Viaje por la historia de México", el cual fue repartido en los hogares de México. Yo tengo dos por ahí arrumbados...

Falta el último año, en medio de un proceso electoral que será muy disputado y se ve aún bastante largo el camino. Mientras la gente no sepa estas cifras reales de la situación del país, difícilmente podrá tomar decisiones ni concluir si realmente este ha sido o no un buen gobierno.

viernes, 16 de septiembre de 2011

El gobernador da su primer Grito de Independencia

Por Gabriel Mercado


Culiacán. En medio de alegría, luces, música y un fuerte dispositivo de seguridad, el gobernador Mario López Valdez dio su primer Grito de Independencia.

En una noche calurosa, con un despliegue de agentes de tránsito, policías municipales, soldados, bomberos y elementos de protección civil en los alrededores de Palacio de Gobierno, una gran cantidad de personas se dieron cita a la tradicional fiesta y abarrotaron la explanada, en la cual se acomodaron sillas para los espectadores.

Los vecinos de las instalaciones gubernamentales se conformaron con acomodarse en las banquetas o la entrada de sus casas para escuchar la música y disfrutar de lejos el espectáculo de luces.

Las cercanías del edificio se convirtieron en un verdadero tianguis. Esquites, churros, tacos, orejas y varas luminosas, entre otros artículos surtían los comerciantes.

Se colocaron tres escenarios donde los artistas musicales amenizaron la noche. También había pantallas gigantes para poder ser vistos sin problemas.

Fue alrededor de las 23:00 horas cuando se escuchó la trompeta de un militar, en el segundo piso de Palacio, anunciando la llegada del mandatario estatal, acompañado del secretario general de Gobierno, Gerardo Vargas Landeros; el comandante de la Novena Zona Militar, Moisés Melo García; y el alcalde de Culiacán, Héctor Melesio Cuen Ojeda.

En el tercer piso había un "área especial" para invitados, mientras otros más acudieron a acompañar a Malova en el sonar de la campana.

Entre los asistentes estaban los familiares de López Valdez, algunos funcionarios estatales y Nuestra Belleza Sinaloa Grecia Gutiérrez Godoy.

Luego sonaron las trompetas y música para anunciar el arribo del lábaro patrio, el cual fue entregado a Mario López Valdez, quien se acercó a la campana y comenzó a agitar la bandera vitoreando:

"¡Viva Miguel Hidalgo!, ¡viva José María Morelos y Pavón!, ¡viva Josefa Ortiz de Domínguez!, ¡viva Allende!, ¡viva Guerrero! ¡Viva México!, ¡viva México!, ¡viva México! ¡Viva Sinaloa!".

Posteriormente hizo sonar la campana, entregó de vuelta el estandarte y se iniciaron los juegos pirotécnicos. En la explanada se encendieron seis círculos de fuego y luego apareció el símbolo nacional, el águila devorando una serpiente sobre un nopal y debajo las letras "¡Viva México y Sinaloa!".

Luego surcaron el cielo cohetes multicolores durante unos cinco minutos, iluminando el firmamento, con el eco de sus tronidos y las matracas, aplausos y gritos de los observadores.

Fue una noche tranquila, sin incidentes, sólo se disfrutó de la celebración y la fiesta del 201 aniversario del inicio de la Independencia de México.


*Nota publica en El Debate de Culiacán

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Sinaloa, primer lugar en mejores leyes de compras

Por Gabriel Mercado


Culiacán, Sin.- De acuerdo al estudio "Competencias en las Compras Públicas", realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Sinaloa es primer lugar en tener leyes que permiten las "mejores prácticas" en la adquisición de bienes y servicios.

Sin embargo, el IMCO señala la disparidad y diferencias de las legislaciones del país en relación a las buenas prácticas internacionales.

En dicho estudio recalca que la existencia de buenas leyes en esta materia fomentan procesos de compras competidos, mientras la existencia de reglas de compra poco claras genera espacios de discrecionalidad de la autoridad y, por lo tanto, aumenta la probabilidad de comprar mal (caro y/o sin calidad) y de cometer actos de corrupción. De igual forma, pese a la existencia de dichas normas, no descarta que las autoridades en la práctica no las sigan.

En el análisis se utilizaron 41 indicadores, donde la calificación promedio global de los 32 estados y la federación fue de 46.5 de 100 puntos posibles.

El gobierno federal llegó a 70 puntos, mientras Sinaloa alcanzó el nivel más alto de los estados, con 61, y Guerrero quedó en el último lugar, con 23.

El IMCO criticó, entre otras cosas, que tanto Sinaloa, Hidalgo y el gobierno federal tengan leyes para limitar la compra si el precio ofertado es menor a un precio conveniente.

La premisa detrás de las normas de este tipo es que existe un precio mínimo al que se debe comprar, para asegurar la calidad de los bienes o servicios. Sin embargo, la mayoría de las leyes establecen que para poder hacer una oferta económica es indispensable que la propuesta técnica cumpla con los requisitos de calidad establecidos en las bases o convocatorias. De esta forma, imponer un límite inferior al precio resulta un obstáculo innecesario a la obtención del precio más bajo posible.

El documento agrega la existencia de leyes donde menciona la posibilidad de una adjudicación directa, porque la compra es de escaso valor pero no se define un límite a este monto.

De esta manera, los funcionarios encargados de las compras gubernamentales tienen libertad de definir cuándo utilizar la adjudicación directa, aunque este es un método que no genera competencia. Así lo aplican BC, Guerrero, Michoacán, Morelos y Sinaloa.

El IMCO recalca que cada año, con el dinero derivado de los impuestos, las entidades federativas gastan más de 60 mil millones de pesos en la compra de bienes y servicios. Esta cifra excede en cuatro por ciento el gasto total en carreteras, en 30 por ciento el presupuesto anual del Seguro Popular y en 60 por ciento el programa de desarrollo humano Oportunidades.


*Nota publicada en El Debate de Culiacán.